La famosa cueva de
Lascaux (Francia) fue descubierta en el año 1940. Las pinturas plasmadas en esta gruta se encuadran
cronológicamente dentro del
Paleolítico Superior, en el periodo
Magdaleniense.
Entre los motivos
pictóricos representados en la cueva de
Lascaux podemos destacar la presencia de grandes
bóvidos, muy naturalistas, con marcados detalles anatómicos, como cornamentas, pezuñas, hocicos, ojos, orejas, etc.
Équidos de diferentes tamaños, ciervos, aves, etc. También nos
encontramos con la
representación de signos geométricos, lineas, arboriformes, y lo que se ha interpretado como
símbolos sexuales masculinos y femeninos.
Una de las pinturas más interesantes de la cueva de
Lascaux es aquella que se
sitúa en la parte más recóndita de la cueva, conocida como
El Pozo, en esta pintura se representa un
bisonte que ha sido abatido por una jabalina, junto al que se encuentra lo que se ha interpretado como un hombre con cabeza de
pájaro, que parece haber sido alcanzado por el mismo bisonte, por lo cual nos encontramos ante una interesante escena de caza.
En 1963 la cueva fue cerrada al público debido al grave daño que estaban sufriendo las pinturas debido a la gran cantidad de
visitantes que
recibía diariamente. Por ello se decidió crear una replica de las mismas para que fuesen
visitables, de esta forma se creo
Lascaux II, que es
visitable de 1983. Otra muchas pinturas de la cueva de
Lascaux son
visitables también en las
reproducciones que se encuentran en el
Centre d'art préhistorique du Thot (Thonac - Dordogne).
Para más información:
http://www.lascaux.culture.fr/#/fr/00.xml